Desoxidante: Cuándo y cómo usarlo
Como ya conocemos, uno de los peores enemigos a la hora de conservar nuestro vehículo es el óxido. Con un desoxidante podemos solucionar el problema, pero siempre va a depender del estado de la zona afectada. El óxido se crea cuando ciertos metales quedan expuestos al agua y al oxígeno del aire. En Talleres Reciauto te explicamos como lo hacemos nosotros.
Cuando nos llega un cliente con un vehículo oxidado tenemos que valorar si debemos usar un desoxidante o no. Lo primero que tenemos que hacer es ver en qué zona está oxidado y si es viable su reparación. El óxido normalmente aparece en chapas exteriores pero también pueden aparecer en interiores y piezas mecánicas. Para solucionar este problema podemos usar un desoxidante.
Tipos de óxidos
- Óxido en chapas exteriores: Es el más habitual, y suele aparecer en zonas con mayor contacto con la humedad. Puedes aconsejar a tus clientes que cuando detecten un pequeño golpe lo lleven a reparar, porque si lo dejan a un lado puede oxidarse, sobre todo si ha saltado la pintura.
- Óxido en chapas interiores: Es el más complicado tanto de detectar como de tratar. Al aparecer en zonas de difícil acceso solemos darnos cuenta cuando la pieza está ya muy desgastada, por eso en muchos casos la única opción que nos queda es la sustitución de la pieza y sanear con un desoxidante la zona contigua. Si el óxido llega a afectar a la estructura tendrá una difícil solución y muy costosa.
- Óxido en piezas mecánicas: Este tipo de óxido es muy agresivo, ya que si tenemos que aflojar un tornillo o tuerca oxidado tenemos muchas posibilidades de que se rompa.
Eliminar el óxido
No existe una única forma de hacerlo, pero viene bien valorar si el óxido está en chapas exteriores y no tiene daños a nivel de estructura. Si es así, podemos eliminarlo sin tener que sustituir la pieza. Necesitaremos para ello un tratamiento de desoxidante para eliminar por completo el óxido y para protegerlo más adelante.
Recomendamos hacerlo así:
- Con una amoladora quitamos la pintura de la zona afectada.
- Enmascaramos la zona contigua.
- Aplicamos un desoxidante por la zona afectada y dejamos actuar .
- Limpiamos la zona.
- Aplicamos imprimación.
- Pintamos la pieza.
Si tienes algún vehículo oxidado no olvides ponerte en contacto con nosotros a través de nuestra web o de nuestros perfiles de Facebook y Twitter.